La falta de productividad conduce a la falta de felicidad. Cuando no te ves a ti mismo haciendo progresos o consiguiendo cosas, te pones ansioso y te estresas. Por eso es tan importante aprender a ser productivo. También hay muchas cosas que contribuyen a la infelicidad: las notificaciones de las redes sociales, los correos electrónicos,…